Para ello, DB Schenker ha adquirido cuatro camiones eléctricos de distribución Scania P25 y otros híbridos Scania PHEV, que forman parte de la transición de la compañía hacia el abandono de los combustibles fósiles en esta ciudad. El objetivo es llegar a ser la primera isla/provincia del mundo en cuanto a sostenibilidad. Así, lo que va a llevar a cabo DB Schenker es muy especial, ya que van a hacer que toda una provincia cuente con transporte logístico sin combustibles fósiles de una sentada.

«Ya operamos en toda Suecia con vehículos eléctricos y sabemos cómo funciona. Estamos preparados para dar el siguiente paso e invertir en transporte eléctrico para toda una provincia. Así, marcaremos la diferencia de verdad. Además, aprendemos mucho sobre las operaciones eléctricas tanto en zonas urbanas con muchas paradas y retenciones como en zonas rurales con distancias de más de 300 kilómetros», afirma Viktor Strömblad, jefe de la Fuerza Logística Terrestre de DB Schenker.

Con todo, la flota de camiones de DB Schenker se está electrificando muy rápidamente y el objetivo global es que todo el transporte (tierra, mar y aire) debería ser climáticamente neutro en 2040, aunque la empresa está trabajando para lograrlo mucho antes.

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