En lo que se refiere a los vehículos de transporte de mercancías, los de hasta 3,5 toneladas que hayan superado los 160.000 kilómetros en los primeros cuatro años, tendrán que pasar la ITV cada año. En este sentido, se establecerán lecturas registradas del kilometraje para evitar manipulaciones de los cuentakilómetros. Además, se empezará a controlar el funcionamiento de los sistemas electrónicos de seguridad de los vehículos, como el ABS o el ESP.

Por otra parte, en las inspecciones técnicas en carretera se controlará la correcta sujeción de la carga, ya que, según la Comisión, la inadecuada sujeción de la mercancía es un factor presente en el 25% de los accidentes de camiones.