El fabricante germano ya contaba con un departamento exclusivo, el Volkswagen Vehículos Comerciales Oldtimers, dedicado a preservar la herencia y memoria del Bulli, su furgoneta nacida hace 65 años, que se ha convertido en un objeto de culto.

En el nuevo Oldtimer Centre efectúan restauraciones parciales o totales, acondicionamientos para que puedan circular o renovaciones de la pintura, entre otras actividades.

Situado en Hanover, el edificio ocupa una superficie de 7.000 metros cuadrados, cuenta con un banco de moldeado de láminas de metal, tornos, fresadoras, y hasta su propio taller de pintura. En este mismo edificio se guardan los cien vehículos que este departamento de Volkswagen ha adquirido y restaurado durante sus cinco años de existencia.