Los que como yo que nacimos a principios de la década de los 70 y apenas vimos unidades del Bulli más allá de alguna imagen televisiva –y eso que este vehículo estaba en pleno apogeo- o escuchábamos alguna de las historias que el familiar de turno –en este caso mi padre- nos contaba sobre este ‘mito’ con ruedas, muy arraigado a la cultura hippie, no podemos sino alegrarnos de que Volkswagen Vehículos Comerciales haya decidido resucitar este vehículos histórico.

Y es que, aunque parezca mentira, todavía tiene miles de seguidores en todo el mundo, muchos de los cuales han cuidado hasta la máxima expresión esta furgoneta clásica –en caso de tenerla- para poder presumir de cuando en cuando de ser poseedor de este clásico. En este sentido, en España tenemos la suerte de contar con una de las concentraciones furgoneteras más multitudinarias de cuantas se celebran hoy en día con el Bulli como protagonista, la Furgo Volkswagen, que año tras año reúne a los amantes de este vehículo en Sant Pere Pescador (Gerona), en plena Costa Brava, habitualmente el último fin de semana del mes de mayo o el primero de junio.

Bendita locura

Sea como fuera, la marca alemana ha decidido rescatar esta leyenda, de ahí que los ingenieros del fabricante formasen un equipo con los expertos en sistemas de propulsión de Volkswagen Group Components y la compañía eClassics para dar forma a este proyecto.
Como base para el futuro e-Bulli –el que se ha presentado virtualmente a causa de la pandemia mundial por eso de la crisis del coronavirus es un prototipo-, el equipo escogió el T1 Samba Bus producido en Hanover en 1966, que utiliza los últimos componentes de los sistemas de propulsión eléctrica del grupo.

Pero lo primero es detenerse en su figura, que, sin lugar a dudas, es lo que más llama la atención. Por lo pronto, lógicamente, el chasis ha sido rediseñado. Así, utiliza ejes multibrazo delantero y trasero, con amortiguadores y puntales de suspensión coilover ajustables, además de un nuevo sistema de dirección de cremallera y cuatro discos de freno ventilados internamente, que contribuyen a que la conducción dinámica se transmita a la carretera con aplomo y serenidad.

Estampa imponente

En cuanto a su diseño, todo recuerda al mítico Bulli, con las lógicas modificaciones para adecuarlo a los tiempos de hoy. De tal forma, exteriormente, y si bien la figura es muy similar a la de antaño, incluye detalles como los nuevos faros delanteros LED redondos con luces diurnas. En la parte trasera también hay indicadores de carga LED, que informan al conductor que se acerca al e-Bulli del nivel de carga de las baterías de iones de litio. Especialmente atractivo es el acabado general del vehículo, con dos tonos de pintura, "Naranja Metálico Energético" y "Metálico Matte Arena Dorada".

Interior de ensueño

Pero si el exterior es realmente impactante, el interior es, simplemente, un sueño, en tanto que se ha respetado todo lo posible el concepto primigenio. Empezando por el puesto de conducción, en el que destaca su volante ‘vintage’ y su frontal. Además, el nuevo velocímetro analógico está basado en el original, e incluye en su interior una pequeña pantalla digital que proporciona diversa información al conductor, incluyendo la autonomía. Unos LEDs también indican, por ejemplo, si el freno de mano está activado o si el cable de carga está enchufado.

Propulsor eléctrico de de 81 CV de potencia

No podemos dejar de referirnos al botón de start/stop del motor eléctrico, integrado en la consola, así como a la palanca de cambios –esta con tintes más modernos-, situada entre los dos asientos delanteros. Por otro lado, el e-Bulli integra una tablet a la altura del techo que ofrece una gran cantidad de información. A través de "We Connect" de Volkswagen, el conductor puede acceder, mediante una app para smartphone o a través de un PC y del portal web correspondiente, a información online, como el tiempo de carga restante, los kilómetros recorridos, los tiempos de desplazamiento, el consumo de energía y la recuperación.

Por su parte, la música a bordo viene de una radio de estilo retro con un look auténtico que, sin embargo, está equipada con la última tecnología, como un receptor DAB+, Bluetooth y USB.

Conversiones sobre la base de la T1,T2 y T3

El e-Bulli cuenta con tres filas de asientos para ocho plazas, con una tapicería en tonos claros muy cuidada. Por su parte, el suelo está recubierto con madera sólida, que imita el aspecto de la cubierta de un barco, dando al conjunto una sensación muy agradable que se ve reforzada por el techo panorámico retráctil.

En definitiva, un sueño para los amantes de este tipo de vehículo, que más pronto que tarde estará a la venta. Así, todos los que quieran ser propietarios de este e-Bulli lo tendrán que hacer a través de eClassics, que realiza la conversión del T1 completa a partir de 64.900 euros. Por otro lado, eClassics también ofrece las conversiones del T2 y del T3.

Un motor cero emisiones

El e-Bulli equipa un silencioso propulsor eléctrico que entrega 61 kW (81 CV) y 212 Nm de par máximo, el cual está disponible de forma inmediata. El cambio automático cuenta con varias posiciones (P, R, N, D, B), de manera que en la posición B, el conductor puede variar el grado de recuperación de energía durante el frenado. La combinación entre la caja de cambios y el motor eléctrico, integrado en la parte trasera del vehículo, impulsa el eje posterior.

El suministro de energía viene de una batería de iones de litio, con una capacidad utilizable de 45 kWh. Un sistema de electrónica de potencia situado en la parte trasera del vehículo controla los flujos de energía de alta tensión entre el motor eléctrico y la batería y, en el proceso, convierte la corriente continua (DC) almacenada en corriente alterna (AC). Además, la electrónica de a bordo funciona con los 12 voltios de energía suministrados por un convertidor DC/DC.

Hasta el 80% de carga en 40 minutos

La batería del e-Bulli se recarga a través de un enchufe de sistema de carga combinada (CCS), que permite cargar el vehículo con corriente alterna o continua. En el caso de la corriente alterna, la batería se carga mediante un cargador AC con una potencia de carga de entre 2,3 y 22 kW, en función de la fuente de energía.

Por su parte, y por lo que respecta a la corriente continua, gracias al enchufe CSS del vehículo, la batería de alta tensión también puede cargarse en puntos de carga rápida de hasta 50 kW de potencia. Si se opta por esta posibilidad, puede cargarse al 80% en 40 minutos. Con todo, la autonomía con la batería al 100% de su capacidad es de más de 200 kilómetros.