Sin embargo, ANFACAR (Asociación Andaluza de Empresas Fabricantes de Carrocerías y Remolques) el balance económico positivo de VEINASA tiene unos claros perdedores: los usuarios de las ITV que reforman sus camiones, furgonetas o turismos que obligatoriamente tienen que inspeccionar en una ITV para volver a circular.

Así, este tipo de reformas requieren, una vez llevada a cabo la reforma del vehículo, la elaboración de la documentación técnica que debe ser examinada de forma obligatoria por personal técnico titulado de la ITV para más tarde pasar una inspección no periódica del vehículo. En estos casos, las demoras son muchos más amplias que las inspecciones periódicas, llegando a retrasarse incluso meses la cita en una ITV de VEIASA.

En este sentido, para un propietario de un camión con una reforma de ponerle una caja basculante, o instalar una plataforma elevadora, son desesperantes. No se puede disponer del vehículo que en la mayoría de los casos son elementos necesarios para el trabajo de autónomos o empresas.

Con todo, y según los estudios llevados a cabo por ANFACAR, los plazos medios desde que se remite toda la documentación de los vehículos reformados a una estación de VEIASA hasta que se consigue superar la inspección son superiores al mes y medio de plazo, mientras que en otras comunidades autónomas españolas, los plazos giran en torno a la semana o diez días hábiles.

Esta situación de demora ha sido denunciada por ANFACAR ante la Consejería de Industria y a la propia VEIASA a lo largo de los 12 años que lleva creada esta asociación. No obstante, pese a todas las reuniones en estos últimos años y propuestas de mejora, nunca se resolvió este problema y “la situación en estos momentos catastrófica” al unirse la problemática surgida con las inspecciones periódicas.

La reciente ampliación de la plantilla de VEIASA solo ha afectado a inspectores y personal administrativa y no resuelven el problema en lo relativo a las inspecciones no periódicas denunciado insistentemente por ANFACAR. Los técnicos encargados de inspeccionar este tipo de reformas, requieren de una preparación técnica, además de la titulación académica, ya que es necesario el conocimiento de toda la extensa, compleja y cambiante normativa que afecta a las reformas de vehículos. También resulta llamativo que a estas alturas las ITVs de VEIASA, no dispongan de un sistema informático para presentar la documentación técnica para legalizar una reforma de un vehículo, teniendo que llevarse la documentación personalmente a la ITV en papel o CD.

Por todo ello ANFACAR ha solicitado tener una urgente entrevista, con el Director General de Industria de la Junta de Andalucia quien a su vez es también Consejero Delegado de VEIASA desde hace 15 días, para que pueda conocer de primera mano las urgentes demandas del sector.

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