Todas las asociaciones son conscientes del drama humano creado por la pandemia del Covid-19, y señalan que “priorizamos la lucha contra la enfermedad y la recuperación de todos los enfermos como nuestro principal objetivo y deseo. Cada uno, dentro de nuestras posibilidades, estamos aportando nuestro esfuerzo a la sociedad para reducir su coste humano y social”.

En ese sentido, el sector de la automoción es uno de los más afectados en lo que a economía se refiere. La necesidad de proteger a los trabajadores, sumado a las restricciones derivadas del estado de alarma, han provocado un cese total de la actividad productiva y comercial, que coloca al sector en una situación muy complicada.

Tanto es así, que las matriculaciones de vehículos han caído un 69% en marzo y se esperan descensos diarios del 90% en abril.

No obstante, y aunque la actividad comercial se recuperara durante el mes de mayo, la crisis económica posterior provocará una grave incertidumbre en los consumidores y en las empresas al respecto de su propia estabilidad económica y la de sus empleos.

Por otro lado, la cadena de valor industrial se encuentra paralizada desde el 16 de marzo, y aunque las fábricas españolas reanudaran su actividad de forma paulatina a partir del mes de abril, serán necesarios varios meses para volver a plena producción.

 Peso de la automoción en el empleo de España

“Se calcula que, al menos, unos 350.000 empleados del sector (entre fabricantes, componentes y distribución) han tenido que acogerse a ERTES para paliar el impacto negativo de la parada de actividad. Y esta recuperación también será paulatina, muy condicionada a la existencia de unas medidas de apoyo contundentes y ágiles, centrados en dinamizar el mercado y la producción, y que permitan al sector de automoción recuperar su efecto tractor en el conjunto de la economía”, señalan las asociaciones profesionales de automoción.

Por todo ello, consideran que será necesaria la adopción de un plan de choque nacional de apoyo al sector, con medidas de impulso a la demanda, que ayuden a la recuperación global del mercado y sus servicios, que promuevan la renovación del parque automovilístico con todas las nuevas tecnologías disponibles e impulsen el cumplimiento de los objetivos medioambientales del sector.

Así, este paquete de medidas debería tratar todos los aspectos más importantes para la industria y el sector de la automoción para garantizar la competitividad y viabilidad futura de todas las empresas y componentes de la cadena de valor de este sector.

Con todo, señalar que el sector de la automoción representa el 10% del PIB y el 9% del empleo en España, siendo uno de los sectores industriales de mayor peso específico, inversión y empleo del país.

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