Alvaro Pedroche
Director de la Revista Truck y editor Web de CamionActualidad.es en DIFUNDALIA, es el jurado en España del TRUCK OF THE YEAR y del VAN OF THE YEAR
La conducción nocturna, consustancial al transporte, conlleva una serie de connotaciones que todo conductor debe atender al fin de disminuir los riesgos que ella comporta.
La primavera no sólo la sangre altera, sino que con ella llega un síntoma que es cada vez más común entre las personas: las alergias, que no son otra cosa que una defensa de nuestro organismo.
Aunque ya comienza a remitir, la gripe, fiel a su cita anual, ha hecho su aparición y este año con cierta virulencia. Muchos de nosotros, por no decir la mayoría, hemos padecido este virus, sin saber muy bien de qué se trata exactamente o incluso confundiéndolo con un resfriado.
Con las fiestas navideñas las contundentes comidas y cenas provocan en nuestro organismo un exceso de ingestión de calorías que se terminan reflejando en una prominente barriga. Es hora de luchar contra ella.
Si nos preguntaran por el órgano más grande de nuestro cuerpo, poco acertarían a señalar la piel, y sin embargo, así es, a pesar de que le dediquemos menos cuidados de los aconsejables.
Las largas horas al volante pueden ocasionar problemas en las extremidades inferiores, es decir, las piernas, debido a prolongados tiempos de inactividad. Sepamos como combatirlo.
Como ya se ha mencionado en otras ocasiones, la espalda es la parte que más problemas nos suele ocasionar durante la conducción.
En la vida diaria son muy comunes las contracturas y tensión en la espalda, y más aún en aquellas personas que por su trabajo pasan muchas horas sentadas.
A la hora de emprender nuestro recorrido es importante que estemos en plenas facultades. Una mala puesta a punto de nuestro cuerpo antes de comenzar el viaje, puede provocar un cansancio prematuro, exceso de sudoración, estados de ansiedad e incluso de claustrofobia, desembocando todo esto en un riesgo al volante.