Así, FPT Motorenfirschung ha puesto en marcha en Arbon, Suiza, un proyecto de innovación sobre el uso de DME, un combustible alternativo en un motor de gran potencia de 11 litros.

Este combustible (dimetiléter) es apto para motores de ignición por compresión y puede producirse a partir de varias fuentes renovables. Además, sus propiedades químicas permiten reducir en gran medida las emisiones de NOx y de partículas y a la vez mantener elevada la eficiencia del motor. No obstante, el uso del DME como combustible conlleva algunos problemas, especialmente, especialmente en lo relativo al equipo de inyección de combustible.

Por su parte, el DME lleva décadas empleándose en la industria, sobre todo como propulsor en latas de aerosol, ya que no es tóxico, es inodoro y puede absorberse en la troposfera. Asimismo, señalar que el DME es igual al GLP y se licúa con niveles de presión muy moderadas.

Con todo, este proyecto está financiado por la BFE (Oficina federal suiza para la energía, por sus siglas en alemán) y el banco de pruebas se encuentra en los Empa (Laboratorios federales suizos de ciencia y tecnología de materiales, por sus siglas en alemán) en Dübendorf, donde la compañía ha realizado grandes inversiones para adaptar la infraestructura al DME.

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