Cromotrans y su Iveco Stralis Dual-fuel

Iveco Stralis Dual-fuel de Cromotrans Reportaje

Reportajes Escrito por Joan Garriga Viernes, 23 Septiembre 2016 02:00 tamaño de la fuente disminuir el tamaño de la fuente aumentar tamaño de la fuente 0

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Cuando se habla de innovación en el transporte se suele hacer cuando un fabricante automovilístico propone una nueva tecnología o cuando un gran grupo decide ensayar alguna nueva técnica. En cambio hoy, Javier Mesa, uno de los socios propietario de Cromotrans nos demuestra que también desde la pyme es posible estar en primera línea.

Cromotrans es un operador logístico que cumple 10 años en este 2016, impulsado bajo la actividad de dos socios; Javier Mesa y Manel Parés. Con su pequeña, pero creciente, flota da servicio a una serie de clientes del área industrial de Barcelona. Hemos quedado en un polígono cercano a Granollers, concretamente en Santa Perpètua de la Mogoda, junto a una estación de servicio de Gas Natural Fenosa, donde es posible repostar tanto los combustibles tradicionales como gas natural, sea licuado o comprimido. Y precisamente ese resulta ser el objeto de nuestra atención, pues en Cromotrans llevan ya un tiempo experimentado con el uso del gas natural como combustible en uno de sus camiones.

El día a día de la distribución

A Javier lo reconocemos fácilmente cuando llega puntualmente a nuestro encuentro al volante de su Iveco Stralis 6x2 perfectamente rotulado con los colores de la empresa. Enseguida iniciamos una animada conversación: “Sí, ya ves. Como copropietario de una pequeña empresa de transportes tienes muchas responsabilidades, pero además sigo trabajando al volante de este camión”.

En cuatro palabras nos acerca a la realidad de una empresa de transportes que ya sabe lo que es superar una dura crisis: “Nos hemos centrado más en un tipo de transporte concreto. Antes teníamos más camiones trailers y hacíamos transporte por casi todas partes, ahora casi todo lo que tenemos son rígidos y estamos muy centrados en la zona de Barcelona y el resto de Catalunya. Hemos abandonado algunos trabajos con precios muy ajustados y hemos disminuido riesgos”.

Cromotrans trabaja aportando materias primas a industrias, realizando portes a algún transitario y también reforzando a otros transportistas, además de para algunos clientes directos. “Vas donde el mercado mejor te lleve. Damos servicio a los clientes y por eso si uno demanda salir a Francia o bien llevar mercancía ADR pues le haces también ese porte. Ahora tenemos cinco camiones rígidos, todos pesados. Para algunos servicios a más distancia pues recurrimos a otros transportistas contratados”.

Inquietud personal

Javier nos cuenta cómo ha llegado a tener uno de sus camiones con el sistema Dual-fuel: “Lo cierto es que llevaba dos años mirando en todas partes. Me impulsaron a pensar en utilizar gas natural como combustible dos motivos. Por un lado, el tema costes que, aunque el gasóleo bajó, siempre es interesante, y también la preocupación medioambiental”. Así las cosas, nuestro protagonista veía la oportunidad de aprovechar la lógica preocupación frente a la contaminación en un argumento de diferenciación frente a los clientes.

“Ahora llevamos ya unos meses probando con la transformación que la empresa Evarm hizo al Iveco Stralis 350 con el que trabajo. Ahora el camión equipado con el motor Iveco Cursor 8 350 CV. trabaja igual, pero combina gasoil y gas natural comprimido. Una vez el motor alcanza la temperatura de trabajo se mezclan ambos combustibles casi al 50%. Si vas a una zona donde no puedes repostar gas natural sigues sólo con diésel, pero normalmente utiliza mezcla de gas y gasóleo. Aunque lo cierto es que hemos empezado nuestra prueba en el peor momento posible, ahora el gasóleo está más barato que nunca en 10 años y apenas resulta rentable si cuentas la inversión realizada, poder decirle a un nuevo cliente que utilizamos camiones de baja contaminación resulta un factor muy importante. Tenemos que ser capaces de salirnos de la simple guerra de precios del sector y así puedes ir a captar un cliente directo con el tema medioambiental como factor diferencial”.

Buenos resultados

En el día a día Javier ha seguido trabajando al volante de su Stralis como siempre, únicamente un piloto te indica cuando el sistema de inyección empieza a mezclar gas natural comprimido, GNC, con el gasóleo. El repostaje se realiza de igual modo, simplemente debes llenar dos depósitos desde dos postes distintos, cada uno con un tipo de combustible. La experiencia de trabajar con gas natural está resultando muy satisfactoria:

“Las cosas no van del todo mal. Estamos pensando en poner otro vehículo, un ligero, en la empresa y probablemente sea un vehículo tipo el Iveco Daily con motor a gas natural. Queremos que el tema del bajo impacto medioambiental sea una característica de nuestra empresa. Podemos aportarles imagen ecológica a nuestros clientes”. Además, este tipo de vehículos se pueden beneficiar, según las zonas, de diversas ayudas y beneficios económicos como por ejemplo disminución en el pago del impuesto de circulación.

Más barato que el gas natural

El área metropolitana de Barcelona cuenta con siete puntos donde repostar gas natural comprimido, aunque cuando ha tenido que realizar algún servicio de largo recorrido el sistema Dual Fuel evita cualquier riesgo de quedar sin poder repostar, ya que el motor opera como un diésel normal. “De hecho -nos dice Javier-, estamos planificando el trabajo con el camión igual que antes, no nos ha cambiado en nada la organización desde que utilizamos GNC”.

La empresa ha sopesado la posibilidad de adquirir un camión pesado con motor de gas natural, pero el precio, aún elevado, sigue siendo un importante hándicap para la popularización de estos motores, como nos reconoce el propio Mesa. “Estuvimos comparando un camión de tres ejes con cabina grande, bien en diésel con 500 CV. o bien en motor exclusivo a gas natural, de 330 CV, pero todavía nos salía mucho más caro el camión a gas que el diésel, pese a ser bastante menos potente. Por eso, de momento en pesados seguimos con el Dual Fuel. Si de un camión a otro iban más de 40.000 euros de diferencia, una adaptación Dual Fuel puede estar en el orden de los 14.000 € de sobreprecio. Eso sí, en un caso el camión sólo consume gas, más barato y en el segundo siempre mezcla gas y diésel”.