Este manual, además de incluir algunas modificaciones para clarificar algunos procedimientos, trae como principal cambio la eliminación de las restricciones impuestas en el proceso de inspección técnica como consecuencia de la pandemia.

En ese sentido, esas restricciones afectaban sobre todo a la comprobación del correcto estado del troquelado del bastidor y a la comprobación de la centralita electrónica del vehículo a través de un lector OBD (On Board Diagnostics), dos procesos para los cuales se requería el acceso al habitáculo del vehículo.

Por su parte, el número de bastidor de un vehículo es una combinación única de 17 dígitos alfanuméricos que identifican los vehículos que se venden en Europa de forma exacta sin posibilidad de error.

Así, durante la inspección técnica mediante la inspección visual del número de bastidor, se comprueba lo siguiente:

• Su existencia
• Su estado (ilegible, manipulado, inconpleto, etc.)
• La coincidencia con el número que figura en la documentación.

Este número suele ir ubicado en los siguientes lugares:

• Grabado en el salpicadero y visible desde la luna delantera.
• En la placa del fabricante.
• Troquelado sobre el propio chasis del vehículo.

Por otro lado, el OBD es un sistema que permite la conexión con un ordenador externo a la centralita electrónica del vehículo. Con esto puede comprobarse la no existencia de errores o modificaciones no autorizadas en la centralita de control del vehículo.

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