De este modo, la nueva gama Jumper cuenta con dos nuevas variantes: Worker y Driver.

• Worker: dirigida a profesionales que transportan materiales y que circulan sobre cualquier tipo de caminos. Se reconoce por sus pasos de rueda negros, su plancha de protección bajo el motor y sus faldones delanteros y traseros. Además, se beneficia de una motricidad mejorada gracias al control de tracción inteligente asociado a unos neumáticos all season y al Hill Assist Control. Dentro de su equipamiento principal destacan la climatización delantera con guantera ventilada, un sistema de audio con kit manos libres Bluetooth y toma USB, un regulador de velocidad y un portadocumentos en el salpicadero.

• Driver: concebido para profesionales que deben llevar a cabo largos recorridos y muchas entregas cada día en zonas urbanas y extraurbanas. Se caracteriza por su confort de marcha, reforzado por una toma de carga USB; faros antiniebla, sistema de navegación, Pack Safety con Active Safety Brake, alerta de cambio de carril, luces automáticas, y el Pack Visibility, con limpiaparabrisas delantero automático y el reconocimiento de señales de velocidad.

 Por otro lado, toda la serie Jumper ofrece también sistema de vigilancia del ángulo muerto y alerta de tráfico trasero, que permite detectar la presencia de vehículos a una distancia de 50 metros que se acerquen por ambos lados.

Además, la nueva gama incluye el Citroën Connect Box, solución que incluye control de consumo de carburante, seguimiento del vehículo en caso de robo, localización del vehículo en el caso de las flotas, y gestión del mantenimiento.

Con todo, bajó el capó, el nuevo Jumper cuenta con propulsores que se anticipan a la nueva reglamentación Euro 6.2, basados en el bloque 2.2 BlueHDi de entre 120 y 165 CV, asociado a una transmisión de seis velocidades.