No es habitual que los fabricantes participen en comparativas en las que los protagonistas son motores de alta potencia porque en estos casos el consumo deja de ser la principal preocupación, aunque con los desarrollos a los que podemos optar en la actualidad se han perdido los complejos, y estos colosos se atreven a competir, incluso en gasto, con potencias menores.

Esta vez nos hemos ido a Múnich y hemos puesto a prueba a Mercedes Benz con su Actros 1851 y su avanzada cabina con espejos interiores, a Scania y su flamante R 540 que acaba de aparecer en el mercado y a Volvo con su FH 500 I Save y su recién estrenado "Turbo Compound".

Los tres vehículos vienen con lo mejor y más avanzado de cada casa y todos ellos, independientemente del resultado final, tienen mucho que ofrecer a los apasionados de los camiones, con originales novedades que nos hacen prever un cambio de ciclo en el que la tecnología y la electrónica piden paso a las clásicas mecánicas para afrontar las necesidades que nos plantea el mercado.

Hemos necesitado en total una semana para completar todas las pruebas a las que hemos sometido a estas avanzadas máquinas y todos los recorridos, como en anteriores ocasiones, han discurrido por el sur de Alemania entre las localidades de Múnich y Nuremberg, para las etapas de consumo. Se trata de un recorrido fácil y con un poco de todo, desde llano a zona montañosa pero cuenta con un inconveniente, está muy castigado por el intenso tráfico de la zona sur de Alemania.

Fue la zona de Pfahenfor, situada a unos 50 km. al norte de Múnich, y muy próxima a Ingolstadt, que presenta diferentes alternativas hacia la capital bávara y hacia Stuttgart, la que elegimos para completar el resto de las pruebas.

Seis en línea

Todos los constructores han optado por arquitecturas de seis cilindros en línea y motores de unos trece litros pero con rendimientos algo superiores a lo que hoy por hoy, tiene más éxito en el mercado.

El fabricante de la estrella, que jugaba en su campo, optó por la potencia más equilibrada de los tres participantes, 510 CV. que eran ofrecidos por su OM 471, un grupo propulsor nivelado que complementa a un camión muy agradecido del que pudimos disfrutar en cada uno de los recorridos que realizamos a sus mandos.

De los tres fabricantes, Mercedes Benz es quizás el que más ha apostado por la electrónica como apoyo para el piloto durante la conducción y esto puede convertirse en un problema si no estudiamos un poco antes de empezar a trabajar con estos aparatos, ya que necesitamos ciertos conocimientos básicos para sacar el suficiente provecho de esta evolucionada maquinaria.

De hecho, para cambiar los cruceros ya no hay botones físicos sino pantallas y a través de ellas vamos eligiendo diferentes menús con los que controlamos los sistemas. Si no sabemos cómo, corremos el riesgo de que el camión utilice los programas estándar que son los más conservadores y aunque esto no es del todo negativo, sí que estaremos infrautilizando la gran cantidad de opciones que nos ofrece la electrónica.

Scania está de estreno con su nueva planta de 540 CV. de potencia ofrecidos por su motor de seis cilindros en línea, una opción de la que hasta ahora se encargaba su colosal V8. Con esta nueva posibilidad el fabricante de Södertälje explora una nueva clientela que apuesta más por camiones funcionales aunque potentes y por arquitecturas de trece litros frente al V8, en busca de menor consumo y coste inicial.

También Scania apuesta por altos niveles de tecnología pero sin tantas innovaciones para el conductor. Así, merece la pena resaltar el buen resultado que están obteniendo con su retardador embragable y su caja de cambios equipada con lo que denominan el sistema de freno de contra eje, con el que los cambios se realizan en menos tiempo y con menos pérdida de inercia.

Volvo llega a la competición con su motor D13TC y, como no podía ser de otra manera en el fabricante sueco, se trata de un seis cilindros en línea, arquitectura por la que ha apostado firmemente durante años, aunque en esta ocasión acompañado por su recién estrenado Turbo Compound, tecnología que llevaba congelada hace unos años y con la que parece que Volvo ha encontrado un aliado para contener el consumo, algo que últimamente están exigiéndole sus clientes frente a la dura competencia actual.

Esta renovada tecnología está basada en la recuperación de los gases de escape para a través del accionamiento de una serie de engranajes patentados por Volvo, impulsar el cigüeñal y ganar de esta manera hasta 300 Nm. de par motor, con el apoyo del resto de mecanismos que completan este sistema.

Hablando de cabinas

Cada fabricante ha optado por la cabina que ha entendido que mejor cuadra con este camión, y como al final el consumo siempre está presente, los dos constructores suecos han optado por cabinas algo menos voluminosas que la del fabricante alemán que sí ha optado por su otra estrella, la cabina plana.

Al entrar en la cabina del Actros resaltan su piso plano y una admirable sensación de espacio útil. La posibilidad de plegar la cama contra la pared trasera hace realidad esta sensación aunque por otro lado, nos obliga a mover los respaldos de los asientos cada vez que queramos desplegar la litera. La consola central resta algo de espacio habitable pero mejora el de almacenamiento y además separa el espacio de trabajo del de descanso.

Asimismo, uno de los detalles que nos regala este habitáculo es una red situada en el lugar que ocuparía la cama superior que permite organizar algo más el interior si hablamos de bultos de poco peso. Pese a ello Mercedes Benz ha presentado la cabina más ligera de las tres con un total, en igualdad de condiciones de combustible, de 7.288 kg.

Scania prefirió montar su cabina R, que no cuenta con el piso plano pero que nos ofrece otras ventajas como una aerodinámica más refinada que tiene su colofón en el capricho del ajuste eléctrico del deflector de techo, algo muy interesante para quien cambie mucho de semirremolque.

También nos ofrece ventajas en cuanto al peso, que sumados a los 300 kg. que nos ahorramos con el 6 en línea frente al V8, son razones interesantes para que nos decantemos por esta combinación. De los tres participantes, los de Södertalje están en el medio en cuanto a taras de cabina con 7.370 kg.

Por otro lado, el fabricante del grifo mima a sus clientes con detalles que entusiasman a estos, como la luz de cortesía que está situada en el inferior de las puertas y que, al abrirlas, refleja el emblema de la casa contra el suelo al más puro estilo "Batman".

Volvo ha ido con todo, y eso ha supuesto que su cabina sea la más pesada con 7.610 kg. pero, sin duda, sus clientes agradecerán las ventajas que supone esto en cuanto a comodidades interiores y aunque no se trata de una cabina con piso plano, poco le falta. La calidad de los acabados interiores es algo que siempre hemos resaltado en esta cabina y en este caso, no ha cambiado mucho su interior y no cabe duda de que en cuanto nos sentamos nos sentimos en un Volvo.

El puesto de trabajo está muy bien diseñado, con ergonomía pero la palanca de velocidades sigue siendo un obstáculo cuando tratamos de pasar del puesto de conducción al interior del habitáculo y ,aunque ya existe la posibilidad de solicitar un accionamiento a través de una serie de botones situados en el salpicadero, echamos de menos una palanca más actual en la caña del volante.

Scania R540

Con la nueva arquitectura de seis cilindros en línea para este tipo de potencias, Scania invierte en simplicidad, incluso confía la responsabilidad de mantener emisiones sólo al AdBlue descartando la recirculación, frente a su mecánica V8, muy apreciada por una parte de su clientela, que probablemente encuentre muchos peros a los 13 litros.

Pero todos apreciarán la mentalidad de la casa de Södertälje en el diseño de su puesto de trabajo con la gran versatilidad que nos ofrece su volante, la concepción de sus automatismos y la simplicidad de su uso hasta el punto de que nos permite manejar el camión con tan sólo un dedo, y conociéndolo podremos adaptarlo bastante a nuestra forma de conducir. Aunque no ocurre lo mismo con la información permanente del salpicadero, excesiva hasta perdernos en ella sin encontrar el dato que buscamos.

Todos ganan

Si nos ceñimos exclusivamente al consumo Scania sale victorioso, Mercedes queda en el medio y Volvo en tercera posición de esta prueba a tres, pero nada es tan simple.

Utilizando nuestra relación entre velocidad y consumo podríamos hablar de casi un empate técnico ya que si vemos los resultados en cuanto a velocidad la tabla queda justo al contrario, siendo Volvo el más rápido, Scania en segundo lugar y Mercedes como tercero, si bien es cierto que Volvo se destaca algo más negativamente en consumo, vino con un camión con menos de 15.000 km. de rodaje y con la cabina más pesada, era la que nos ofrecía mejores acabados, lo que por otro lado tuvo premio ya que en el apartado, más subjetivo, de opinión de los profesionales que participaron, fue el Gotemburgo el que cosechó las mejores puntuaciones con 5 puntos más que Scania que quedó después y con Mercedes en tercera posición.

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